Al contrario de un destino poco turístico, hay personas que esperan de su destino de vacaciones prácticamente un parque de atracciones, es decir, que ofrezca múltiples servicios de entretenimiento a cualquier hora del día.
No obstante, nos vamos a fijar con el punto opuesto. Hay otras personas más interesadas en la esencia del lugar y buscan autenticidad sin florituras de ningún tipo. Es muy importante conocer bien cómo te gusta viajar a la hora de, por ejemplo, pasar unos días en un destino poco turístico. ¿Qué esperar de aquellos países que aún no son muy visitados, como es el caso de Cabo Verde?
Según estadísticas recientes, el archipiélago africano está recibiendo al año alrededor de medio millón de turistas. Estas cifras contrastan ostensiblemente con las de destinos populares como París, ciudad que solo en 2017 fue visitada por unos 34 millones de personas. Ver ranking de países más visitados.
Las estádisticas no engañan
En base a estos datos, podemos concluir que, efectivamente, Cabo Verde no es un destino turístico convencional. De hecho, este sector aún no está desarrollado al 100% en el país, por lo que carece de sentido esperar la misma oferta de servicios que otros más masificados.
Eso sí, esta situación varía en gran medida en función de la isla o ciudad que visites. Por ejemplo, la isla de Sal es, sin duda, la más visitada de Cabo Verde y esto ha dado como resultado que su oferta turística sea mayor que en otros puntos del archipiélago. Sal es, entonces, un destino ideal para aquellos viajeros en busca de playa y variedad de actividades turísticas.
Pese a que tampoco podríamos decir que esta isla es un destino concurrido, lo cierto es que hay más servicios de ocio y entretenimiento que en otros rincones.
Este perfil de visitante no teme improvisar y sabe disfrutar de los pequeños detalles que va encontrando a su paso.
Cabo Verde, el lugar perfecto para quienes no temen improvisar
El archipiélago africano es un destino para todos los gustos. Como decíamos, hay lugares cuya oferta lúdica es mayor, como es el caso de las islas de Sal y Boa Vista o Praia, la capital caboverdiana. En estos sitios, los viajeros encontrarán un buen número de atracciones turísticas.
Pero Cabo Verde está sobre todo indicado para quienes desean alejarse de las multitudes, para aquellos que no buscan nada en concreto y prefieren ir descubriendo un país que día a día sorprende.
Se trata, por tanto, de un destino para quienes gozan de una mentalidad viajera más abierta. Este perfil de visitante no teme improvisar y sabe disfrutar de los pequeños detalles que va encontrando a su paso. Tan pronto se adentra sin pretensiones en un pueblo recóndito de la isla de Maio, como es invitado a faenar en un barco de pesca con un local en la playa de Tarrafal después de intercambiar unas palabras con él. Y es que, en ocasiones, las mejores experiencias son aquellas que no se planean.
En conclusión, ¿qué puedes esperar de un destino poco masificado como Cabo Verde? Realmente, lo mejor es no esperar nada y dejar que te sorprenda. Y ten por seguro que así será.
Al contrario de un destino poco turístico, hay personas que esperan de su destino de vacaciones prácticamente un parque de atracciones.
Personas que buscan un llugar que ofrezca múltiples servicios de entretenimiento a cualquier hora del día.
No obstante, nos vamos a fijar en aquellas más interesadas en la esencia del lugar. Las que buscan autenticidad sin florituras de ningún tipo. Es muy importante conocer bien cómo te gusta viajar a la hora de, por ejemplo, pasar unos días en un destino poco turístico. ¿Qué esperar de aquellos países que aún no son muy visitados, como es el caso de Cabo Verde?
Según estadísticas recientes, el archipiélago africano está recibiendo al año alrededor de medio millón de turistas. Estas cifras contrastan ostensiblemente con las de destinos populares como París, ciudad que solo en 2017 fue visitada por unos 34 millones de personas. Ver ranking de países más visitados.
Las estádisticas no engañan
En base a estos datos, podemos concluir que, efectivamente, Cabo Verde no es un destino turístico convencional. De hecho, este sector aún no está desarrollado al 100% en el país, por lo que carece de sentido esperar la misma oferta de servicios que otros más masificados.
Eso sí, esta situación varía en gran medida en función de la isla o ciudad que visites. Por ejemplo, la isla de Sal es, sin duda, la más visitada de Cabo Verde y esto ha dado como resultado que su oferta turística sea mayor que en otros puntos del archipiélago. Sal es, entonces, un destino ideal para aquellos viajeros en busca de playa y variedad de actividades turísticas.
Pese a que tampoco podríamos decir que esta isla es un destino concurrido, lo cierto es que hay más servicios de ocio y entretenimiento que en otros rincones.
Este perfil de visitante no teme improvisar y sabe disfrutar de los pequeños detalles que va encontrando a su paso.
Cabo Verde, un destino poco turístico para quienes no temen improvisar
El archipiélago africano es un destino para todos los gustos. Como decíamos, hay lugares cuya oferta lúdica es mayor, como es el caso de las islas de Sal y Boa Vista o Praia, la capital caboverdiana. En estos sitios, los viajeros encontrarán un buen número de atracciones turísticas.
Pero Cabo Verde está sobre todo indicado para quienes desean alejarse de las multitudes, para aquellos que no buscan nada en concreto y prefieren ir descubriendo un país que día a día sorprende.
Se trata, por tanto, de un destino para quienes gozan de una mentalidad viajera más abierta. Este perfil de visitante no teme improvisar y sabe disfrutar de los pequeños detalles que va encontrando a su paso. Tan pronto se adentra sin pretensiones en un pueblo recóndito de la isla de Maio, como es invitado a faenar en un barco de pesca con un local en la playa de Tarrafal después de intercambiar unas palabras con él. Y es que, en ocasiones, las mejores experiencias son aquellas que no se planean.
En conclusión, ¿qué puedes esperar de un destino poco masificado como Cabo Verde? Realmente, lo mejor es no esperar nada y dejar que te sorprenda. Y ten por seguro que así será.